Son mujeres con una autoestima muy grande, son extremadamente vanidosas y valoran por encima de todo el dinero. No es que eso sea malo, pero es un perfil complicado de llevar y de agradar. Además, tienen un gran apetito sexual; muchas de ellas después de una jornada de trabajo se van a discotecas a ligar con chicos guapos y olvidarse de los sapos a los que han besado.
También son muy fanáticas de los perfumes caros y de que todos a su alrededor huelan bien. Si quieres un grado más de implicación de una escort o puta, ponte un perfume caro y veras como te mira con mejores ojos. Espero que no haga falta decir, que antes de asistir a la cita con la escorts ducharte concienzudamente.
Lo peor que se puede hacer en una cita con una escort es dudar y dejarla hacer a ella sin solicitar nada en concreto. Piensa que ellas trabajan por tiempo y no les suele costar nada dilatar el tiempo para que la cita se acabe rápido sin haber hecho nada de lo que tenías en la cabeza. Lo mejor es guiarla en lo que tiene que hacer en la cama solicitando en cada momento lo que os apetece, penetración, sexo oral, etc.
En el tema de los masajes, les recomendamos partir el tiempo en dos y dedicar la mitad del tiempo en el masaje y la otra mitad con sexo o final feliz. Y aunque no se deben obsesionar con el tiempo, debes tenerlo en cuenta para que no se queden en medio del polvo. Si eres de los que necesitan su tiempo para todo, les recomiendo ya directamente contratar una hora del servicio.